Veamos. En la escuela, en pueblos y ciudades o, de estirar el zoom, en todos los países y continentes, existen -o nos inventamos, o aparecen por sus logros o por decreto- referencias: puntos estratégicos que van desde accidentes geográficos y momentos excepcionales de su historia a destacados personajes o sus obras. Por de pronto, en Belize, llevamos un par de décadas machacando contra la corriente y la apatía mayoritaria para ver cómo, quizás algún día, nuestra gente asumirá que los artistas y su trabajo son -o deberían ser- componentes naturales de la vida, elementos imprescindibles en el desarrollo de la nación; vaya, nuestra aportación al planeta.
Yasser Musa, en un acto celebrando la memoria y legado del artista/músico Andy Palacio, de rebote y mientras explicaba su visión sobre la metamorfosis de los últimos años de Andy, soltó una ráfaga de ideas y visiones para de paso ampliar nuestra batalla aprovechando cualquier oportunidad en donde haya quien escuche para seguir dale que dale. En isthmus bellicus, está claro que el tema es de guerra prolongada. ¡Oh…! y quien no sepa de Andy, que surfee en la web. Resumo lo que dijo YM y que además comparto.
VIVIENDO LA ERA GLOCAL / La principal aportación de Andy Palacio a Belize fue la transformación artística. Andy pasó la mayor parte de su carrera bajo la fórmula “aceptable” de intérprete estrella del género Punta Rock. Pero a mediados de los 90 inició un período de verdadera colaboración, exploración, experimentación y -a fin de cuentas- de redefinición. Al sacudirse los estereotipos sobre su identidad y sumergirse en la introspección, resurgió como un nuevo artista.
DAR LA CARA Y LUCHAR / Los artistas tendrán que aprender a dar la cara y luchar. Esto no es nada nuevo, pero ahora la lucha debe superar al propio proceso artístico, hacia las esferas sociales, políticas y de la educación. No podemos escondernos detrás de nuestra obra. En agosto de 2008, en landings 9 / the forum, artistas del Caribe + Centroamérica + Yucatán declararon unánimemente que debemos convertirnos en guerreros. Los artistas deben dedicar más tiempo a la lectura, aprender sobre el universo de la ciencia, la tecnología y el arte, y así moverse libremente entre sus medios creativos, colaborando entre sí y desarrollando nuevos sistemas para el futuro.
EN BUSCA DE MENTORES / Los mentores son como bibliotecas vivientes, esponjas de experiencia con quienes uno puede calibrar ideas y conceptos. Los artistas deben convertirse en pensadores capaces de actuar. Deben levantarse al amanecer, despertando al unísono con los pescadores, los recolectores de basura y la gente que va al mercado. A esa hora el aire parece que tuviera una profundidad de miles de besos. Los artistas deben jugar ping-pong con las ideas.
EL ARTE Y LA EDUCACIÓN CULTURAL YA ESTÁN EN NUESTRA ÓRBITA / ¿Cómo podemos esperar que nuestros hijos se desarrollen y piensen creativamente si no tienen contacto con el arte y la actividad cultural? Nuestro principal recurso es su imaginación. En esta segunda década del siglo 21 se debe enfatizar la importancia de las ciencias -las sociales y las exactas- y de la historia como una forma de autocomprensión adecuada. Sin embargo, seguimos insultando la inteligencia de nuestros pueblos con mitos y mentiras sobre el pasado.
LO QUE APRENDÍ DE LANDINGS/ De 2003 a 2010 participé, junto con más de 70 artistas del Caribe + Centroamérica + Yucatán, preparando y realizando una serie de exposiciones y eventos desde La Habana hasta Taipei, pasando por Washington y Conkal, Yucatán, entre otras sedes. Esta ha sido la principal experiencia en mi proceso de educación artística, ya que pude relacionarme con personas que luchan para desarrollarse como artistas. Pronto aprendí que:
➀ Como insiste JD, el mundo global del arte está regido por un sistema que nada tiene que ver con nosotros. Para [nuestros] jóvenes artistas que lean este texto, déjenme atajar: el verdadero problema es Belize y la valentía que se requiere de ustedes para mejorarlo, no el engañoso resplandor de Facebook y YouTube.
➁ No debemos quedarnos satisfechos con “las sobras y migajas de los viejos imperios”. Ahora, al reflexionar sobre los años en los que participé en landings, pienso que fuimos capaces de resistir tanto la comercialización como la cosificación e ingresar a un nuevo espacio, a una dimensión mayor a nosotros mismos.
➂ Somos responsables de la ruta que elijamos. En esta era de vampirismo, debemos sortear las presiones que intentan socavar nuestra energía creativa.
Afrontémoslo: necesitamos nuevos puntos de referencia. Cuando los helicópteros aterrizan en los techos de los hospitales, se guían por un círculo que señala el sitio preciso. Necesitamos trazar un nuevo blanco, apuntar y fuego.
ART + CULTURE / WHAT ARE WE GOING TO DO? / decade 2 / century 21 / The Andy Palacio Lecture / Bliss Centre for the Performing Arts, Belize City, Belize / Wednesday 2 December 2009 10 am / Yasser Musa
Sus palabras todavía retumban en mis oídos y veo que se ha volatizado año y medio. Quiero hablar de nuestros países. Comparto otras líneas -un poema esta vez- de Yasser, primero porque si de países y traumas va la cosa, con 4 líneas tenemos debate interminable sobre cómo se nos irrespeta, y porque recordándolo constato el peso de tantos años en esta -digamos- lucha cultural en Belize y en referencias clave en nuestras vidas paralelas en el exilio como son los summits en la 51 en Mérida o los días de pláticas interminables y té en el Siam Restaurant de New Orleans hace unos 20 años.
“where are you from,” said bored bartender / “belize,” said i / “that’s part of mexico, right,” ( ! ) said crazy cook / “wrong, we’re independent,” said i / “why don’t you all just be a part of mexico, good with NAFTA!” said bored bartender / i hung my head for a line, / “you guys from china?” said i / “what? china? we are thai, from thailand,” said crazy cook / “well, why don’t you join china, good with new capitalism!” said i
siam silence / yasser musa, 1993
Sigamos. Ciertamente ciertas cosas no cuadran. 27 de abril, actualizándome con las noticias de Belize y del mundo, vean lo que uno tiene que leer: “There’s nothing we can do to over-hype the Cross Country… there’s nothing we can do to ease to the country’s collective torment because -for the second year in a row- a Guatemalan crossed the line first on Holy Saturday 2011” (7newsbelize.com). Estamos hablando de una simple carrera ciclista. Increíble. Chequeo El País: “El que no inventa no vive”, dijo Ana María Matute aceptando el Premio Cervantes; “Mourinho es el puto amo”, dijo Pep Guardiola en rueda de prensa. Menos mal que de repente encuentras palabras que reflejan inteligencia.
Y así cada día. La poesía (el arte) está en la vida misma. Es cuestión de saber jerarquizar el exceso de situaciones que nos saturan. Si no, leamos otra vez el poema citado de Yasser. Aquí no hubo necesidad de re-inventar. Un artista es -en nuestras latitudes, para los que así lo vemos- un inventor de la mismísima realidad que, bien sabemos, a ojos lejanos es pura ficción.
Algo nos falla en este Istmo y en el Caribe -áreas en las que por inercia histórica/geográfica delimito automáticamente como mi entorno inmediato- y es muy sencillo: vivimos en cuerpo aquí pero nuestras referencias e incluso anhelos están allá.
En Belize tuvimos el 21 de septiembre de hace casi 30 años un panorama idóneo para empezar our long march en las múltiples áreas de la vida de nuestra nación. Podíamos permitirnos el impagable lujo de empezar desde zero. Después de todo, es mejor enseñar a tocar el oboe a alguien que nunca tuvo instrumento musical alguno en sus manos que a alguien que sopló una trompeta en la escuela para subir o bajar banderas y en consecuencia acarrea cierta deformación de oído y motivo para soplar. A veces, carecer de es un haber.
Siempre vi como una maravilla empezar a ser país sin tener museos, sin clanes de artistas ni las llamadas escuelas de arte ni la egoísta red que ello comporta. Afilo las palabras y añado contemporáneo al concepto arte. De hecho, trabajo desde hace tiempo en las posibles maneras de re-estructurar nuestras instituciones, presupuestos y expectativas en el mundo de la pretendida Cultura y separar -como el Moisés con su varita- lo contemporáneo del resto: arte que sin el adjetivo adjunto -contemporáneo- existe y sobrevive por doquier, resultado de una manera de vivir y querer desarrollar países usando blue prints de antaño, vengan de las metrópolis o de las ciudades que quitan el sueño para ir a trabajar, o de compras o a empezar de nuevo a ver si realmente nos va mejor. El arte como profesión calcada o degenerada de los conceptos europeos de hace siglos, o como aditivo a la arquitectura -decoración- o como sustento personal -mercantil- o maquila nacional.
¿Es nuestro trabajo una aportación para salir del subdesarrollo en mayor o menor grado? Aquí si no hay grises Pantone - que son docenas: o lo crees firmemente o ya estás del otro lado, o sea, allá.
Irónicamente, en 1992, un evento muy ajeno a la cotidianidad de Belize fue la excusa que nos trajo hasta aquí. Mientras millones bailaban, se beneficiaban o despotricaban, o muchos más supongo ni se enteraron o les importaba un carajo la revisión/evaluación de los 500 años anteriores, un par de jóvenes artistas empezaron un proyecto de arte integral, con una visión y actitud contemporánea -llamado Minus 8- que implicaba una cuenta regresiva al nuevo milenio y una invitación a marcar una raya. Enough. Fue un compromiso individual y en conjunto -y también con terceras partes- que los artistas fueron cumpliendo año tras año, realizando cantidad de eventos y desarrollando proyectos: creación de fundaciones de arte, publicación de libros, múltiples exposiciones en el país, la creación de una productora musical de repercusión internacional, un parque escultórico en el monte… hasta llegar a las puertas del 2000 habiendo dejado atrás una estela de Minus 7 y Minus 6, 5 etc… hasta lo que sería -creo- un imposible matemático: ¿un Minus 0? No.
Hasta aquí, los artistas -el componente principal de la detonación inicial en 1992- habían cumplido por pura dinámica propia. Así es que nació ZERO new belizean art y de principios del 2000 a finales del 2002 realizamos 10 exposiciones, recorriendo museos, espacios alternativos, galerías y fundaciones de arte en Mérida -la de Yucatán-, La Habana, Barcelona -la de Catalunya-, Lisboa, 2 en la Ciudad de Guatemala, Antigua Guatemala, Caracas, Santo Domingo y finalmente la Ciudad de México. Empezamos con 3 artistas y el Poustinia Land Art Park y terminamos habiendo presentado cientos de obras de más de una docena de artistas. ¿Población del país en aquel entonces? Algo menos de un de cuarto de millón. Suena mucho para nosotros, pero realmente es poco.
ZERO como proyecto para salir al exterior, proyectándose e integrándose a un mundo más amplio, un sistema para aprender y de paso sumarse a un esfuerzo nacional para afianzar nuestra existencia como nombre/país. Se lee como párrafo de un Boletín Oficial de x país, pero aplaudo la duplicidad -cuando es real- entre lo auténtico y lo decretado. Quienes están más o menos en esta jugada de la cultura contemporánea, la cooperación y la pelea por el respeto, saben que finalmente ZERO devino landings abriendo sus puertas a brillantes jóvenes artistas de nuestra región.
landings= nuevo espacio/ruta para transitar a partir de esta brecha comenzada -sin pegar un tiro- durante el transcurso de ZERO y que en vez de seguir extendiendo el número de exposiciones como conciertos añadidos en un tour mundial de un/una rock star decidimos poner un freno total y analizar lo alcanzado e invitar a crear conjuntamente a los jóvenes artistas de lo que nosotros consideramos nuestra región: el Caribe + Centroamérica + ese Sureste mexicano, la península de Yucatán, parte también indisoluble de nuestro inmediato entorno por razones geográficas, histórico/culturales o simplemente por fácil comunicación con Mérida - donde acudimos para pasear, ir al doctor, de compras, ver museos o ir al zoológico, estudiar en sus universidades o, como yo, para ir a trabajar con tranquilidad y máximo calor.
landings = un proyecto en sí mismo y no como bandera del arte de un país (ZERO…).
landings= excusa para ver si contribuimos con este esfuerzo a irnos despojando de tanto lastre nacional ⟷ mini-regional ⟷ hegemónico.
landings= camino alternativo a desarrollarse abrazados de su bandera nacional. Por cierto, una referencia: por acá, a las bienales se va por países. Terrible. Pasan los años, entramos a un nuevo siglo, nos adaptamos e incorporamos sistemas que hasta hace 25 años hubieran sido vistos como ciencia ficción (cosas tan normales y de acceso masivo como Internet o celulares, o la vida usadolarizada). Aceptamos y disfrutamos de las innovaciones selectivamente. Vamos con computadoras comprimidas en un mini celular y en cambio seguimos perpetuando sistemas operativos del siglo pasado respecto de cómo formar artistas. ¿Cómo hacer que nuestra obra sea fuente de inspiración para salir del subdesarrollo y no objeto de venta en galerías de NY? landings fue mucho más que eso. Aquí de lo que se trató fue de descubrirlo nosotros mismos, los que lo creamos y sin duda los miles de espectadores y lectores.
En una extensión territorial como la de El Salvador -por poner una referencia real- nos acabamos de contar y somos en cifras redondas trescientos quince mil habitantes. No hay que ser un excelso matemático para calcular la proporción con simple regla de 3 lo que les correspondería hacer, organizar, producir y compartir a países con población de millones y millones como cualquiera de los restantes países de la región. Con base a nuestra realidad, hacemos lo que podemos.
Suerte tuvimos en Belize que arrancamos la década de los 80s –por despistados que estuviéramos– en un completo vacío, ausencia de. Para nosotros, la ausencia del peso acarreado por siglos de lo que es y sirve al arte y los artistas, fue el trampolín que una década más tarde permitió la aparición de jóvenes interesados en el arte contemporáneo. Interés nacido, por cierto, por razones muy distintas a la norma domesticada de querer ser artista. Así fueron asociándose, conjuntando y conspirando para canalizar sus ideas y trabajos teniendo como referencia lo que querían/queríamos hacer para que cuadrara el deseo o necesidad personal de trabajar en lo que uno se da cuenta que le interesa y, encima, lo hace bien y lo más importante: sumarse a los demás esfuerzos para ver cómo carajos desarrollamos nuestra gente.
Mentalmente claros en este tema, pasar entonces a aprender -con la práctica- a conocer y trabajar con nuestros vecinos inmediatos por distantes que históricamente estén clasificados o nos veamos mutuamente. No me releo para que no haga delete y darme cuenta de lo poco brillantes que suenan estas palabras o la manera de decirlas. Pero nada le quita que sean una aplastante verdad cuyo reflejo se escucha, ve y lee à la carte por quienes tengan este interés de aprender per se y más aún de los vecinos y, de paso, poder vivir el día que un ciclista de la vecina Guatemala es aplaudido con fervor y respeto por venir a nuestro país a pedalear, sudar y encima ganar si esto es lo que la noble lucha de piernas y corazones le depara. Y como todo en la vida, viceversa. Crezcamos, que en esta zona del conocimiento se depende únicamente de nosotros mismos.
Mientras nos acercamos a esa imperante necesidad, aceptemos que nuestra capacidad de engañarnos a nosotros mismos es colosal y la experiencia landings no se escapa pulcramente. Nuestra cronología está salpicada de momentos de ficción cuando de vez en cuando los mismos artistas frente a micrófonos o cámaras -espero que inconscientemente- por minutos se transformaban en parabólicas repetidoras de las llamadas bellezas y orgullos nacionales cuando somos países con índices de subdesarrollo generalizado, criminalidad o insalubridad que en eso si batimos records por fuera de nuestras fronteras. A veces, nos engañamos o tratamos de engañar como que somos países de ensueño con sus arrecifes y bosques con aves de tornasolados colores de National Geographic y gente desbordante de felicidad. Rastreo un email recibido hace unas semanas. Ahí va:
“JD, did you know that this weekend the Audubon Society organized hundreds of do-gooders to collect approximately 2,000 thirty three gallon bags of garbage from the Western Highway? [la carretera que une Belize y Guatemala] ...this really is an art project. It is a conceptual manifestation of our national disease. A people trapped and tainted by an obsession with projecting a lie that we live in a jewel. Our school children are programmed to passively admire and appreciate the natural wonders of the nation, while ghosts and monsters teach them to throw garbage through the bus windows on the way to school”. On 4/13/11 2:31 PM, "Yasser Last Name Musa"